jueves, 24 de junio de 2010





El día 24 de Junio el Barrio de San Juan celebra las Fiestas en honor de su Patrón con actos deportivos, festivos y culturales, para culminar con la quema de la Hoguera, como viene siendo tradicional desde hace años.
Las dos primeras fotos son de los años 80, y la última, de los 70.


miércoles, 23 de junio de 2010

VACACIONES EN FUENGIROLA


Este año me toca pasar un par de semana en las playas de Fuengirola. Bueno, yo de playa más bien poco, porque se me queda pinchado el descapotable en la arena. Pero disfruto de las vistas, del sol, de la brisa del mar, de las cervezas que me tomo sentado en las terrazas, del hotel y del Paseo Marítimo. Además, me gusta callejear solo, ver escaparates y ver y observarlo todo. Me gusta estar solo entre la gente. Montarme fantásticas historias con personajes reales, los más típicos y característicos con los que me cruzo. Comprar algún periódico que nunca leo, porque después de comprado me doy cuenta que me interesa más la vida que lo que dice la prensa.
Y con estas pequeñas cosa soy feliz. Si con las piernas no puedo correr, con la imaginación puedo volar sin límites, obstáculos ni distancias. Mis limitaciones son sólo físicas, los sueños nacen en otra parte, en un lugar al que tengo libre acceso.
Pues, como iba diciendo, faltaré a la cita diaria con vosotros algo así como 15 días. Tiempo que os lo deseo muy felices.
Mañana publicaré la última entrada dedicada a San Juan, y el día 25 salgo para la playa. ¡Hasta mi regreso!

martes, 22 de junio de 2010

ESTATUAS

En las calles, plazas y parques podemos seguir viendo personas que un día fueron importantes. Sin embargo, hoy no les respeta ni el tiempo, ni los gamberros, ni los pájaros. Es lo que pasa cuando la muerte se convierte en piedra, y la autoridad en figura callejera. Cuando no hay vida, sino estatuas.

lunes, 21 de junio de 2010

ANIVERSARIO


Sábado y domingo fuera y hoy, lunes, aquí estoy de nuevo.


El día 26 de Junio se cumple el primer aniversario de CACHOS DE VIDA. Podría decir que no creía poder llegar tan lejos, pero eso no sería del todo cierto. Ha sido norma en mi vida no abandonar nunca un proyecto una vez iniciado, considero que es malgastar esfuerzo y dinero. Si las cosas no van bien, se hace un nuevo planteamiento. Abandonar, nunca. Yo aguantaré hasta que la falta de salud me tire a la cuneta.
Sin embargo, debo introducir algún cambio, bueno, un único cambio, reducir mis entradas a días alternos, un día sí y uno no. Así, vosotros, mis seguidores amigos, tendréis más tiempo para comentar y yo para escribir.
Y espero aguantar, para comentar con vosotros, otros aniversarios. El tiempo corre mucho, lástima que no haya un botoncito para detenerlo cuando somos felices. Yo lo detendría en este momento.
El blog ha sido para mí un feliz experimento. Hay que probarlo todo y pararse donde uno sea más dichoso.
Gracias a todos por vuestro apoyo. Gracias a la persona que me introdujo en otros mundos, que sin ser consciente, me salvó de la desesperación más absoluta en aquellos momentos.

viernes, 18 de junio de 2010

DON BENITO. Antes y después

AVENIDA ALONSO MARTÍN. Entre la primera y segunda imagen han pasado 40 años. Como se puede ver ha cambiado por completo el paisaje urbano, sin embargo, cada cosa armoniza con su tiempo. Coche viejo, fuente moderna.

Pasaré el fin de semana fuera, nada más que sábado y domingo. La vida nos obliga a estar continuamente en movimiento. Siempre de un lado para otro.
Os deseo un feliz fin de semana.

jueves, 17 de junio de 2010

EL VIEJO PASTOR

También yo fui niño, hace ya muchos años, muchísimos. Tantos, que me cuesta recordarlo. Lo que si recuerdo es a un viejo pastor que vivía en una majada cerca del pueblo. Su casa era un chozo hecho de juncos, sus compañeros dos perros mastines blancos y una perrita negra, chiquitina y ladradora, que es la que corría tras la manada de ovejas. Entre la blancura de los animales lanudo destacaban las cabras negras y coloradas que formaban la piara. De noche encerraba el ganado en un redil hecho de cuerdas y estacas de madera. Y por la tarde tomaba un cubo y ordeñaba las cabras. Esta buena la leche recién ordeñada, aquella que todas las tarde me daba el viejo pastor.

Era mi amigo, eso decía yo a quien me preguntaba. Cada tarde yo iba a la majada, y con curiosidad y en silencio, seguía atentamente todo lo que hacía el pastor. Como amasaba la comida de los perros, una especie de harina gorda y agua. Como hacia el queso, prensándolo con las manos en cinchos de madera de higuera.

Cuando terminaba la faena de la tarde se quedaba sentado en el tronco de encina, recostado al chozo. Pensativo un momento, luego se llevaba la mano al bolsillo del chaleco y sacaba una petaca y un librito de papel, y despacio, disfrutando el momento, liaba un cigarro. Se lo ponía en la boca, y de otro bolsillo del chaleco sacaba el eslabón, la piedra y la yesca, que empezaba a arder con las chispas que saltaban del eslabón y la piedra. Y de esa forma, mágica para mí, encendía el cigarro.
Y ahí lo dejaba mirando el cielo, esperando las estrellas, que le contarán algún secreto. Con la perrita negra a sus pies, único testigo de la soledad que bañaba sus pensamientos.


Mi amigo murió como había vivido, solo en el chozo.

miércoles, 16 de junio de 2010

MADRID

MADRID. Plaza de Toros de Las Ventas en el año 1974.

martes, 15 de junio de 2010

EL CULTO AL CUERPO

El culto al cuerpo es por belleza, y en muchos casos a costa de la salud. Que se ve que importa menos. Abundan las enfermedades relacionadas con el peso, de esas responsables de la dieta. Parece que el milagro consiste en alimentarse poco y tomar muchas pastillas, y ejercicios, si se pueden evitar, pues se evitan. La ilusión es que la figura dure lo que dura un verano. La medida, la talla del bañador.

En los planes de adelgazamiento entra hasta el cambio de constitución, poco importa que una persona, por naturaleza, sea fuerte y gruesa, para someterse, igualmente, al hambre de una dieta. A estas les ocurre que a medida que pierden peso se les va poniendo caras de pena, de amargadas y de mala leche. Distintas, muy distintas a las que han tenido siempre. Simpáticas, bonachonas y satisfechas de la vida. Quizás valga la pena el cambio por salud, pero no por figura.

Si es cosa de corregir los defectos de fabricación de la sabia naturaleza, pues, hala, bisturí al canto. Y te dejan tan monito que no te conoce ni tú madre. Te puedes cambiar la nariz, la boca, las orejas, las tetas y hasta los ecéteras, para rematar la faena.

Todavía quedan los potingues, las cremas y los centros de belleza. Por cierto, que cada día hay unos pocos nuevos. Se ve que los negocios del cuerpo, dejan dinero. Lo que no entiendo como hay tanta gente fea habiendo tantas cosas para ponerles guapos-. Quizás sea que el feo de verdad no tiene arreglo,

lunes, 14 de junio de 2010

ENFERMEDAD SIN NOMBRE

Hoy es muy difícil encontrar algo sin nombre, esta casi todo bautizado. La ciencia médica no podía ser menos, y la lista de trastornos y enfermedades aumenta cada día. Poner nombres es muy fácil, poner tratamientos y certificar con seguridad dolencias, es otra cosa. Es normal, la medicina no es una ciencia exacta. Si no fuese porque cada organismo tiene distinto comportamiento frente a la enfermedad, con tantas máquinas y aparatos, casi seguro que sería exacta. No hay que desanimarse, todo llegará.

Los enfermos crónicos de esas enfermedades que no matan inmediatamente, que lo hacen poco a poco e incapacitando, son esas personas a las que el médico ya no sabe que decirles ni como animarlos. Les cambia el tratamiento, les sube y les baja la dosis no muy convencido con el resultado, y lo despide hasta el próximo año, o hasta los dos, o, tal vez, hasta los tres o…

Son cosas que pasan en la seguridad social. En la sanidad privada mientras haya dinero habrá sonrisas, porque el dinero hace que lo importante sea el enfermo.

Hablo con conocimiento de causa, pues llevo sobre 50 años enfermo. Aunque eso es mucho tiempo, todavía no sé el nombre de mi enfermedad. He sido sometido a infinidad de pruebas y reconocimientos, han llenado multitud de página con notas y tratamientos, he tomado toneladas de medicinas, y eso que según especialistas, no tengo tratamiento ni cura. Lo único que he entendido es que tengo una ENFERMEDAD RARA. Y tan RARA, pienso, que hasta el día de hoy no se han atrevido a diagnosticarla. Confío en que con mi autopsia se aclare todo. Es una posibilidad de que se sepa la verdad.

Y lo que son las cosas, visito más veces al mecánico para que me arregle la silla de ruedas, que al neurólogo para que me eche un vistazo. Esto ocurre cada 2 ó 3 años. Quizás sean cosas de las listas de espera, o que mi caso se haya dado por perdido y olvidado. Quien sabe.

Procuraré seguir respirando sentado en el asiento que llevo incorporado. Se vive más feliz si uno no esta cabreado.

domingo, 13 de junio de 2010

SOLTERONA







Como las cuentas de un rosario va pasando su vida, languideciendo en Oras Pro Nobis y misterios. Un rosarios más, un día menos. Transcurre la vida de la solterona igual que un pajarillo preso en una jaula de oro, pero jaula al fin y al cabo. Ella es cautiva de condicionamientos sociales, de dignidad mal entendida. Fue joven y tuvo sueños, y hasta amores imaginarios, de esos que se va llevando el tiempo, quedando el amargo recuerdo de lo que nunca existió fuera del deseo. Y un día apareció la primera cana y la primera arruga y el rictus amargo en sus hermosos labios, y el brillo de la perla de sus ojos se fue apagando. La belleza iba siendo sustituida, poco a poco, paso a paso, por la serenidad resignada, esa que esta llena de dolor y de impotencia. Al tiempo que iba quedando sola, cada vez más lejos de la gente. Más ajena al mundo y más lejana a los placeres de la vida. Sin esperanza.


Se refugia en la iglesia, a rezar o a llorar sus penas. Y sin ser beata, y quizás hasta poco creyente, frecuenta el único lugar donde se siente libre de críticas y de miradas turbias ¿Qué le pedirá a Dios en sus rezos? Mujer triste de misal y velo negro. Digna y solitaria.

Durante años la vi pasar erguida, con porte elegante, con impresionante figura, por el caminito que había hecho entre su casa y la iglesia y entre la iglesia y su casa. Y cuando ya la había olvidado, confundida en mi pasado, la he visto encorvada y chiquitita, convertida en una triste viejecita. Y he sentido pena por lo implacable que es el tiempo, porque ni siquiera nos permite hacer un borrador de la vida para vivir después la buena, corregida y mejorada.
Si la vida se viviese dos veces, ¿volvería a vivir esta mujer la misma?


Recuerdos de los años 60.-

sábado, 12 de junio de 2010

DON BENITO. Antes y después

1º DE MAYO, al fondo. La misma calle con el mismo nombre en las imágenes de los años 70 y en la de 2009.

viernes, 11 de junio de 2010

ULTRAMARINOS


La memoria suele traernos recuerdos simpáticos y extraño. Cosas y sucesos en los que jamás hemos pensado, aunque durante muchos años hayan formado parte de la rutina de nuestras vidas.
Para mí, hoy, me he acordado de los ultramarinos. Sí, esas tiendas pequeñas y oscuras donde se podía encontrar de todo, especialmente, comestibles a granel y también envasados Para ello disponían de todas clases de medidas para la venta de líquidos, tales como los medidores de aceite, balanzas para pesar, molinillo de café, guillotina para vender porciones de bacalao…Por el suelo se podían ver los sacos de patatas, de garbanzos, de lentejas, de arroz, de sal…Y encima del mostrador,-en el ultramarinos que yo más recuerdo-, un gato grande y gordo, color ceniza, durmiendo encima del papel de estraza de envolver, entre un saco de azúcar y una pila de bacalao, y seguido, un queso y una cesta con huevo. Y al fondo, en las estanterías desvencijadas, había latas de conservas, colonias, jabones, artículos escolares, alguna muñeca o caballito de cartón. Y muchísimas más cosas colocadas de cualquier manera. Tampoco pasaban desapercibidos los chorizos y el tocino, que colgaban de una cuerda atada a un clavo pinchado en la pared. El interior de los ultramarinos despedían una mezcla de olores muy característico y peculiar
Tenían una clientela muy especial. Familias pobres, personas que comían lo justo para vivir. Siempre iban con una libreta donde el tendero apuntaba lo poquito que compraban fiado hasta final de mes o, en el peor de los casos, hasta que el marido encontrara trabajo. Y el tendero recordaba de cuando en cuando que la cuenta iba subiendo mucho, pero seguía ayudando a la gente, no dejando de darles fiado.
Estos comerciantes prestaron el más grande de los servicios a aquella gente con tan pocos recursos, que apenas tenían nada que comer cada día. Unos y otros llegaban a formar una gran familia.
Son recuerdos de finales de los años 50.

jueves, 10 de junio de 2010

NO, NO SOMOS LIBRES

No, no somos libres. Para donde quiera que miramos hay prohibiciones. Somos esclavos del sistema, que nos impone tantas reglas de control y vigilancia que es imposible no sentirse prisioneros del mundo. Se nos adiestra para vivir con miedo, pues las prohibiciones son, igualmente, para los buenos y para los malos, con la excepción de atenuantes para unos y agravantes para otros.
La otra falta de libertad, la más grave, es la de pensamiento, ¿quién puede presumir de decir todo lo que piensa? Imposible. Por delito, por normas sociales de convivencia, por educación, por evitar conflictos, por generosidad, por amor, por miedo, por caridad y por tantas cosas por las que estamos obligado a callar y decir verdades a media o mentiras enteras. Las reglas nos hacen mentirosos e hipócritas.
Y aunque no nos gusten las normas ni las reglas, ni siquiera la mentira, ese decir lo contrario de lo que piensa, hemos de aceptar las cosas evitando así el caos del mundo. Pero, no por eso, vamos a dejar de pensar en que somos prisioneros del sistema, y prisioneros de nosotros mismo, siempre sujetando las riendas de nuestro pensamiento.
Todos vivimos con secretos, pequeños o grandes, confesables o inconfesables, pero es equipaje que vamos paseando por las estaciones de la vida. Son pecados para los que el confesor de más confianza es uno mismo.

miércoles, 9 de junio de 2010

DON BENITO

Aspecto de la Plaza de Abastos en los veranos de hace 30 años.

martes, 8 de junio de 2010

SALIR DE LA CRISIS



Parece que no hay unanimidad en las medidas que se toman para salir de la crisis. Si es nuestro bolsillo el que se toca, son malas; si es el del vecino, son buena. Da la impresión que no queremos salir de la crisis, que lo que queremos es que nos saquen. Y es cosa de todos, de ser solidarios arrimando el hombro, que de pelearnos y echarnos cosas en cara ya habrá tiempo.


Todos tienen razón, juntos y por separados, que siempre pagan los platos rotos los que no han probado bocado. Y lo otros se hacen los tontos mirando para otro lado. No son las críticas, ni los consejos, ni tampoco el derroche de palabras que vierten los genios de la economía en abundantes y generosos comentarios. Ha de ser el esfuerzo de todos, bueno y malo, los que tenemos que sacar al país del atolladero.

No quiero que me líen con palabras, porque estoy convencido que todo el que habla tiene razón. Sin embargo, no va a cambiar mi visión de las cosas, y sólo voy a seguir viendo que nuestro país tiene un problema, y es tarea nuestra solucionarlo.

lunes, 7 de junio de 2010

DON BENITO. Procesión

Procesión del Corpus de los años 70.

Uno de los tres días del año que relucían más que sol, era el Corpus Christi. Era el día que se llenaban las calles de juncos, juncias y flores, y en los balcones se colgaban banderas, vistosas colchas y coloridos crespones, todo en honor de la procesión del Corpus. El Corpus Christi bajo palio, y las fuerzas vivas de cada localidad como importante acompañamiento. No recuerdo en que orden, se veían símbolos religiosos y estandartes. Todo seguido por largas filas de niñas vestidas de pequeñas novias y niños de militares, frailes y marineros. Protagonistas todos ellos, de promesa y Primera Comunión. Las niñas portaban cestos llenos de flores, que en ofrenda floral lanzaban al paso del Corpus, al final de la procesión.


No creo que esta procesión haya cambiado mucho, aunque ya no es día festivo, y que la hayan cambiado de jueves a domingo. Pero los niños siguen haciendo la Primera Comunión y los padres no renuncian a exhibir a sus hijos una vez más antes de guardar el traje y dar la fiesta por concluida.


domingo, 6 de junio de 2010

...Y LA VIDA SIGUE


Amigos, aquí me tenéis de nuevo.


Mis problemas informáticos prefiero arreglarlos solo, porque siempre que otras manos tocan el ordenador pierde la configuración con la que yo puedo manejarlo, y entonces tengo que aprender de nuevo el manejo. Además programas que se modifican, se quitan o se ponen otros diferentes. Cuando me cambian algo ya me pierdo. Tengo grandes dificultades para utilizar el ratón y el teclado, y mucha más para enchufar y desenchufar cables, pero, bueno, con maña y paciencia me voy apañando. Sin embargo, es importante que no me cambien nada. Esto no todas las personas lo entienden, por ser cosa tan simple y tan tonta. Ahora, por ejemplo, me ha dicho el técnico que se lo llevó para repararlo, que le había puesto esto y aquello para mejorarlo y que funcionase más rápido. Eso para mí no vale, es preferible que funcione peor, pero conforme a mi discapacidad y necesidades. Así que llevo dos días aprendiendo informática. Y hoy, por fin, me he atrevido a publicar esta entrada, en la confianza que del blog no se haya modificado nada.


No puedo decir que tenga mala suerte con los ordenadores, quizás se deba a que los trato con mucho respeto. No me gusta hacer experimentos con ellos, por el temor de formas líos que no pueda resolver yo solo. Tengo la mala experiencia de perder años de trabajo por un error mío. Y lo lamentable es que no me queda tanto tiempo como para malgastarlo. Voy con prisa y no me puedo permitir el lujo de repetir los pasos que ya he dado.

Después de este pequeño contratiempo informático, estoy seguro que las aguas volverán a su cauce.